martes, 3 de junio de 2008

Los Libros también hablan


Hace un lustro descubrí que los libros hablan. Pero no hablan porque tú los lees y te cuentan historias y fantasías. Eso de alguna manera te lo dice el autor a través de la lectura. ¡No! a eso no me refiero. Trabaje en una librería y solía recorrer el piso de venta en busca de novedades literarias.

Descubrí que existe una atracción simbiótica entre los libros y sus lectores. Por supuesto que no todos los libros son indicados para cualquier lector, ni cualquier lector esta apto para todos los libros. Hay que descubrir la “química” que se produce, cuando en la búsqueda de un libro o inclusive sin buscarlo, te encuentras con el “apropiado”. Como… “amor a primera vista”. Como esa seducción que te cautiva y no puedes más que detenerte a mirarlo.

Decía que acostumbraba a caminar por los pasillos de la librería y sin mirar detenidamente, y sin buscar algo específico, dejaba simplemente que los encuentros se fueran dando. De repente me detenía, y enfrente de mí, aparecía “el” libro. ¡Ese libro que era para mí! Lo tomaba en mis manos, como acariciar dulcemente un rostro y le veía su cubierta. Buscaba en su interior el contenido, para descubrir poco a poco su alma. Y finalmente leía los comentarios en la parte posterior, convenciéndome de que efectivamente: éramos el uno para el otro.

Por eso dicen, y dicen bien, que sólo cuando el alumno esta preparado aparece el maestro.

Luis Miguel

5 comentarios:

silvestre dijo...

Dice Carlos Ruiz Zafón, un autor extraordinario que te invito a leer, en “La sombra del viento”: “En una ocasión oí comentar a un cliente habitual en la librería de mi padre que pocas cosas marcan tanto a un lector como el primer libro que realmente se abre camino hacia su corazón. Aquellas primeras imágenes, el eco de esas palabras que creemos haber dejado atrás, nos acompañan toda la vida y esculpen un palacio en nuestra memoria al que, tarde o temprano -no importa cuántos libros leamos, cuántos mundos descubramos, cuánto aprendamos u olvidemos-, vamos a regresar. Para mí esas páginas embrujadas siempre serán las que encontré entre los pasillos del Cementerio de los Libros Olvidados”.

Miguel Matus dijo...

¿Tú tienes el libro?, préstamelo. Gracias por el comentario. Enriquece

Gringa Vieja dijo...

Rusty, me gusto' mucho la idea de esta atraccion simbiotica entre los libros y sus lectores, cosa que describes de una manera tan poetica. Creo que la atraccion sigue aun con los libros guardados en el estante, libros vivos que nos escogieron, algunos marcados con notas de otros tiempos, con ideas que ya no nos convendran, pero que nos recuerdan del camino que hemos andado para llegar a donde estemos.
Silvestre, bella citacion. Buscare' el libro.

Miguel Matus dijo...

Hablando de viejo: Gringa y Silvestre (y claro yo), se dan cuenta que estamos haciendo una cadena de blogistas ancianos (como diría el Ninja Peruano). Que padre, no?? Ojalá que se cuelguen más.

Gringa Vieja dijo...

Asi es, Rusty. Me siento muy orgullosa de ser una bloguista anciana ;-)